Outeiro Caión

En este post quiero describiros una subida que probablemente no sea de las más duras de la zona, pero sin duda sí una de las más bonitas y agradables por las fabulosas vistas y entorno que nos acompañarán. La etapa se puede empezar en nuestra ciudad, ascendiendo al alto de Pastoriza para tras descender y atravesar el polígono de Sabón, llegar al carril bici costero de Arteixo que comunica la Playa de Alba con la playa de Barrañán, pasando por Repibelo y Valcobo, todo salpicado de continuos repechos cortos pero duros. Una vez alcanzada la playa de Barrañán continuaremos por la carretera que nos conduce a Caión ascendiendo por el pueblo de Chamín una vez arriba de todo encaramos el agradable descenso al pueblo de Caión. Tras un paseillo por esta encantadora localidad recuperandonos de los kilómetros acumulados, podemos ya encarar la ascensión al Outeiro de Caión. Podemos iniciar la ascensión bien desde el puerto la de la imagen o bien desde la playa de As Salseiras, que sería una variante algo más corta, pero dura. Salimos calentando piernas desde el puerto con unos suaves porcentajes en torno al 6-7% que justo al finalizar el núcleo urbano se endurecen para alcanzar el 12-14 % trazando una horquilla de espectacular belleza dejando a nuestra izquierda la inmensidad del océano. Al llegar al cruce con la carretera de Carballo, tomamos esta en dirección hacia la capital de Bergantiños. Aquí la carretera suaviza un poco y los porcentajes no superan el 7%. . Tras aproximadamente un km aparece un desvío a la izquierda por una carretera hormigonada que lleva al Santuario de Los Milagros de Caión. La pendiente aquí se vahaciendo más y más dura hasta alcanzar una vez rebasado el nivel del santuario un desnivel de aproximadamente un 25-27 %, que unidos a la rugosidad del hormigón nos obligarán a utilizar ese platillo pequeño salvador. Una vez superada esta brutal rampa encaramos una zona más cómoda que nos lleva hasta la última rampa durísima también entorno al 25 % de desnivel que nos dejará las piernas como rocas. Desde aquí arriba se vislumbran unas vistas espectaculares de la villa de Caión y su azul y limpio mar. En total habremos ascendido desde prácticamente el nivel del mar hasta los 218 m de altitud en unos tres kilómetros, pero con la dureza muy concentrada en algunos puntos.